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Ya en Illinois, la ciudad de Chicago, es arquitectónicamente la más
espectacular de USA. La mejor vista de la ciudad se tiene desde el rascacielos
más alto de los EEUU, la Torre Willis
Sears. En días despejados se pueden ver el gran Lago Michigan y hasta 4
estados USA desde ella. Uno de los primeros rascacielos de esta ciudad, pionera
en ellos, está inspirado en la Giralda
de Sevilla, de hecho su parte superior es prácticamente igual a esta, y por
supuesto muy parecido a su gemela, la Koutoubia de Marrackech.
Después de salir de Chicago, las
vías del Amtrak llevan a bordear la
zona sur de los Grandes Lagos, y tras dejar el enorme Michigan que baña
Illinois e Indiana, el tren sigue su camino hacia los estados de Indiana, y Ohio, donde su ciudad más
importante Cleveland es bañada por el
Lago Erie.
Buffalo es una de las ciudades mas al oeste del conocido estado de
Nueva York, y con infinidad de imágenes y dibujos del animal que le da nombre,
es la puerta de entrada a la parte estadounidense de unas famosas cataratas.
Tras cruzar en tren el rio Niagara, viendo la bruma que levantan
sus cataratas, en esta época semicongeladas, de nuevo se llega a Canadá, para
visitar sus ciudades del este, las cuales ya visitaría con españolas
acompañantes que se unieron al viaje para finalizar conmigo los últimos días de
esta vuelta al mundo.
“Húndelo, húndelo”. Siempre recordaré las palabras que el policía
de la película “Niagara”, intentaba
hacerle llegar telepáticamente a una desconcertada Marilyn Monroe, que dentro
de la embarcación a la deriva, se dirigía inevitablemente hacia la caída por
las cataratas. Viéndolas desde la parte superior, ves la poca profundidad que
tiene el río Niagara antes de comenzar a precipitarse por sus caudalosas cataratas, y comprendes que la
solución para evitar la caída pasaba por encallar el barco. Los años han
pasado, y con ellos el espectáculo de este precioso derrame de agua, se ha ido
completando con los otros espectáculos del feroz capitalismo americano.
Casinos, rascacielos de hoteles, casas del terror, Planet Hollywood, Hard Rock,
Museo de los Guinnes, torres de observación, y un largo etc. de atracciones
para completar una visita a un paraje natural que a pesar de todo esto, aún
conserva una gran belleza. La vista de las cataratas es claramente mejor desde
la parte canadiense, por su vista frontal de las dos cataratas, y que es
significativamente mejor que la vista lateral o desde plataformas de la parte
estadounidense.
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