BLOG CENTROAMERICA II
05 ENERO LAGO ATITLAN
Desde Antigua nos vamos en una furgo colectiva hasta el altiplano guatemalteco. Aunque Antigua ya esta bastante alta, ascendemos durante casi tres horas de viaje a unos 2600m, por carretera con varios derrumbes, y constantes subidas y bajadas. Se puede saborear el paisaje de agricultores mayas cultivando sobre todo maíz, las mujeres vendiendo en las cunetas sus guisos,bebidas, frutas y hortalizas. Descendiendo luego hacia la ciudad de Panajachel, al borde del precioso lago Atitlan. En realidad el lago de 18 kms de ancho por 12 kms de largo es un inmenso antiguo cráter, rodeado de tres volcanes mas recientes de unos 3000m de altura.
Botes-Lago Atitlán
Nos subimos a un pequeño barco para acercarnos a visitar varios pueblos de la costa occidental de lago. Cada trayecto 10 quetzales, un euro, y empezamos por Sta Cruz a una media hora de tranquila travesía. Nos bajamos en el embarcadero y comenzamos a subir al pueblo a unos 150m de desnivel, con rampas adoquinadas, que nos hace sudar la gota gorda, sobre todo Adrián que lleva su mochila de casi 20 kilos, yo me alegro de haber decidido no llevar casi nada de ropa, hacer mochila de solo 7 kilos. Arriba espectaculares vistas sobre el lago. Tras bajar lo subido, sacando las uñas por delante de las botas, me río yo del Angliru, aquí habría mas del 30% de pendiente, llegamos a coger otra lancha hacia San Marcos tras un cafetillo en la Iguana verde, el único centro de buceo del lago. Es asombroso como cambia el agua en el lago, en la primera travesía estaba como un plato y sin embargo en esta otra se forman olas que nos mojan durante todo el trayecto. El fenómeno lo llaman Xocomil, son vientos en el centro del lago que pueden producir olas de hasta tres metros de altura e imposibilitar navegar por el lago. Llegamos a San Marcos. En este pequeño pueblo se han instalado varios yoguis y centros de meditación, para americanos sobre todo. Pienso que empeoran con la meditacion por que algunos deambulan por el pueblo casi levitando. Nosotros nos comemos unos frijoles y pollo, para seguir en otra lancha hasta nuestro destino de hoy, San Pedro de la Laguna.
San Pedro-Lago Atitlán
Como comprobareis aquí todos los pueblos son santos o santas, el lago Atitlan tiene 13 pueblos y todos beatos, recuerdo de los conquistadores españoles. En San Pedro nos alojamos en un hostal muy bonito con jardines y hamacas delante de los cuartos, el precio de risa: 4 euros la noche. Mucho ambiente hipiota y mucha maría, pero no de las santas. Así todo, todo el mundo a su rollo y buen ambiente de noche. Los mojitos mas baratos que las cervezas.
06 ENERO CHICHICASTENANGO
Hoy dejamos el lago y nos dirigimos a Chichicastenango, tenemos reservada plaza en un colectivo, Vanette pequeña donde se meten hasta 14 personas, para las 8 de la mañana desde Panajachel al otro lado del lago. Nos levantamos a las cinco de la mañana, para caminar hasta el embarcadero y poder coger el primer bote que sale a las seis, ya que si se llena hay que esperar al siguiente que no saldrá hasta que se llene nuevamente. Llegamos pronto pero cuando nos toca se llena el bote y sale, nos subimos al otro pero solo somos 6 y si no hay mínimo 12 no sale. Con nosotros una mexicana de Chiapas, que se vuelve a casa en bus desde Pana a las 7. La pobre ya ve que si no sale el bote pierde el bus y esta ya sin mas dinero para comprar otro billete. Al final decidimos poner 10Q mas cada uno para que el bote salga con menos gente y ella llegue a pillar el bus. La verdad que nunca hicimos a alguien mas feliz con tan solo un euro. Llegamos justo a las 7 menos cinco al embarcadero de Panachajel todos congelados de frío.
A esas horas y con la altura a la que esta el lago, nada mas coger velocidad la lancha es como si estuvieras esquiando en camisa.
Nos cogemos el colectivo a las 8 tras un buen chocolate y rumbo a Chichicastenango, muchos pueblos guates acaban en ¨tenango¨, Quetzaltenango, Chimaltenango, que significa pueblo, en concreto Chichi es pueblo de las ortigas. El viaje es a través de constantes subidas y bajadas de barrancos para alcanzar de nuevo el altiplano. El paisaje es como la isla de la Palma, aunque con muchos cultivos de altura. Nos venimos al pueblo, coloquialmente llamado Chichi, tiene tela, por que los jueves es mercado y este es de los mas grandes de América Central.
Vendedora Quiché-Chichicastenango
La verdad que una vez dentro de el, solo me parece comparable al de la plaza Djemaa el Fna en Marraquech, con su actividad frenética y definiendolo con una sola palabra seria ¨multicolor¨.
Riadas de indígenas de las tribus quiche y cakchiquel, te transportan entre la multitud como una gran masa humana de un lado para otro, todos con mucha prisa y a través de los cientos de puestos de todo tipo, hay manadas de gente. Frutas, carnes, chaquetas, piedras, leña, lana, de todo, y en el medio del mercado barracones de gente comiendo en improvisadas cocinas con típica comida maya.
Restaurante del mercado-Chichicastenango
Yo me tomo una menestra de frutas, todas peladas y cortadas en el mismo puesto, espectacular. Solo 80centimos y seria un cuarto kilo de melón, papaya, sandia, piña,naranja,fresa, genial preparada para comer, así como toda la fruta presentada en la mesa. En la plaza del pueblo contadores de historias congregan a cientos de personas como si fuera un teatro, las historias religiosas, por supuesto.
Chichicastenango
Aquí todo el mundo es muy religioso, pero pasa como en África, tenían sus dioses mayas, los españoles les transmiten el catolicismo, y para acabar ahora los americanos evangelistas. Lio padre, entras en la iglesia y te encuentras a Jesús enfrente, pilas de piedra en el centro con velas quemando, adoración de sus dioses y antiguos chamanes mayas con incienso en latas afumando la iglesia, casi no se ve, pero bueno como casi siempre, todo el mundo respeta a todo el mundo. Eso es lo mejor.
Cementerio cakchiquel
Me acerco al cementerio en el que las tumbas son una mezcla de todas las religiones y algunos chamanes hacen ceremonias encima de las tumbas de sus antepasados con incienso y alcohol. Prosiguen la celebración después y alguno queda K.O a media mañana
Exceso de celebración.
Antes de salir hacia Antigua de vuelta, visito un hotel donde van los touroperadores que trabajan Guate, es el San Tomás, también santo, pero con un patio colonial lleno de jardines, fuentes y unos 30 loros, cacatúas y demás pajarillos enormes de gran colorido y pico grande, grande. Me fijo y todos están sueltos pero acomodados en unos 10 soportes, por parejas y aparentemente muy agusto hablando ¨holaaaa, amigoooo, como estasss, holaaaa¨ genial, tomo un cafetin de Guatemala, escuchando también a un grupo de musicos tocando la marimba.
Ya de vuelta, cogemos la panamericana, que en este trayecto es como mitad autopista del Huerna, con fortísimas pendientes, y mitad Unquera-Llanes, con desvíos, cortes y desprendimientos de altura considerable. Tras unas tres horas y el culo tieso del colectivo donde veníamos 19, divisamos los volcanes del área de Chicastenango, todos alineados y con las nubes pegadas a sus cráteres, a modo de erupción simulada. Llegando a Antigua programo el día de mañana, que para no perder la concentración comienza saliendo a las 4 de la mañana hacia las ruinas de Copán, unas seis horas de viaje en colectivooooooooo..oooo, y se dice del espacio de los charter, las rotulas hay que despegarlas del respaldo del tocayo de adelante. Quesadillas para cenar, ducha y cama, con probabilidades de noche musical. Somos 7 en la habitación, alguno ronca fijo.
Desde Antigua nos vamos en una furgo colectiva hasta el altiplano guatemalteco. Aunque Antigua ya esta bastante alta, ascendemos durante casi tres horas de viaje a unos 2600m, por carretera con varios derrumbes, y constantes subidas y bajadas. Se puede saborear el paisaje de agricultores mayas cultivando sobre todo maíz, las mujeres vendiendo en las cunetas sus guisos,bebidas, frutas y hortalizas. Descendiendo luego hacia la ciudad de Panajachel, al borde del precioso lago Atitlan. En realidad el lago de 18 kms de ancho por 12 kms de largo es un inmenso antiguo cráter, rodeado de tres volcanes mas recientes de unos 3000m de altura.
Botes-Lago Atitlán
Nos subimos a un pequeño barco para acercarnos a visitar varios pueblos de la costa occidental de lago. Cada trayecto 10 quetzales, un euro, y empezamos por Sta Cruz a una media hora de tranquila travesía. Nos bajamos en el embarcadero y comenzamos a subir al pueblo a unos 150m de desnivel, con rampas adoquinadas, que nos hace sudar la gota gorda, sobre todo Adrián que lleva su mochila de casi 20 kilos, yo me alegro de haber decidido no llevar casi nada de ropa, hacer mochila de solo 7 kilos. Arriba espectaculares vistas sobre el lago. Tras bajar lo subido, sacando las uñas por delante de las botas, me río yo del Angliru, aquí habría mas del 30% de pendiente, llegamos a coger otra lancha hacia San Marcos tras un cafetillo en la Iguana verde, el único centro de buceo del lago. Es asombroso como cambia el agua en el lago, en la primera travesía estaba como un plato y sin embargo en esta otra se forman olas que nos mojan durante todo el trayecto. El fenómeno lo llaman Xocomil, son vientos en el centro del lago que pueden producir olas de hasta tres metros de altura e imposibilitar navegar por el lago. Llegamos a San Marcos. En este pequeño pueblo se han instalado varios yoguis y centros de meditación, para americanos sobre todo. Pienso que empeoran con la meditacion por que algunos deambulan por el pueblo casi levitando. Nosotros nos comemos unos frijoles y pollo, para seguir en otra lancha hasta nuestro destino de hoy, San Pedro de la Laguna.
San Pedro-Lago Atitlán
Como comprobareis aquí todos los pueblos son santos o santas, el lago Atitlan tiene 13 pueblos y todos beatos, recuerdo de los conquistadores españoles. En San Pedro nos alojamos en un hostal muy bonito con jardines y hamacas delante de los cuartos, el precio de risa: 4 euros la noche. Mucho ambiente hipiota y mucha maría, pero no de las santas. Así todo, todo el mundo a su rollo y buen ambiente de noche. Los mojitos mas baratos que las cervezas.
06 ENERO CHICHICASTENANGO
Hoy dejamos el lago y nos dirigimos a Chichicastenango, tenemos reservada plaza en un colectivo, Vanette pequeña donde se meten hasta 14 personas, para las 8 de la mañana desde Panajachel al otro lado del lago. Nos levantamos a las cinco de la mañana, para caminar hasta el embarcadero y poder coger el primer bote que sale a las seis, ya que si se llena hay que esperar al siguiente que no saldrá hasta que se llene nuevamente. Llegamos pronto pero cuando nos toca se llena el bote y sale, nos subimos al otro pero solo somos 6 y si no hay mínimo 12 no sale. Con nosotros una mexicana de Chiapas, que se vuelve a casa en bus desde Pana a las 7. La pobre ya ve que si no sale el bote pierde el bus y esta ya sin mas dinero para comprar otro billete. Al final decidimos poner 10Q mas cada uno para que el bote salga con menos gente y ella llegue a pillar el bus. La verdad que nunca hicimos a alguien mas feliz con tan solo un euro. Llegamos justo a las 7 menos cinco al embarcadero de Panachajel todos congelados de frío.
A esas horas y con la altura a la que esta el lago, nada mas coger velocidad la lancha es como si estuvieras esquiando en camisa.
Nos cogemos el colectivo a las 8 tras un buen chocolate y rumbo a Chichicastenango, muchos pueblos guates acaban en ¨tenango¨, Quetzaltenango, Chimaltenango, que significa pueblo, en concreto Chichi es pueblo de las ortigas. El viaje es a través de constantes subidas y bajadas de barrancos para alcanzar de nuevo el altiplano. El paisaje es como la isla de la Palma, aunque con muchos cultivos de altura. Nos venimos al pueblo, coloquialmente llamado Chichi, tiene tela, por que los jueves es mercado y este es de los mas grandes de América Central.
Vendedora Quiché-ChichicastenangoLa verdad que una vez dentro de el, solo me parece comparable al de la plaza Djemaa el Fna en Marraquech, con su actividad frenética y definiendolo con una sola palabra seria ¨multicolor¨.
Riadas de indígenas de las tribus quiche y cakchiquel, te transportan entre la multitud como una gran masa humana de un lado para otro, todos con mucha prisa y a través de los cientos de puestos de todo tipo, hay manadas de gente. Frutas, carnes, chaquetas, piedras, leña, lana, de todo, y en el medio del mercado barracones de gente comiendo en improvisadas cocinas con típica comida maya.
Restaurante del mercado-Chichicastenango
Yo me tomo una menestra de frutas, todas peladas y cortadas en el mismo puesto, espectacular. Solo 80centimos y seria un cuarto kilo de melón, papaya, sandia, piña,naranja,fresa, genial preparada para comer, así como toda la fruta presentada en la mesa. En la plaza del pueblo contadores de historias congregan a cientos de personas como si fuera un teatro, las historias religiosas, por supuesto.
Chichicastenango
Aquí todo el mundo es muy religioso, pero pasa como en África, tenían sus dioses mayas, los españoles les transmiten el catolicismo, y para acabar ahora los americanos evangelistas. Lio padre, entras en la iglesia y te encuentras a Jesús enfrente, pilas de piedra en el centro con velas quemando, adoración de sus dioses y antiguos chamanes mayas con incienso en latas afumando la iglesia, casi no se ve, pero bueno como casi siempre, todo el mundo respeta a todo el mundo. Eso es lo mejor.
Cementerio cakchiquel Me acerco al cementerio en el que las tumbas son una mezcla de todas las religiones y algunos chamanes hacen ceremonias encima de las tumbas de sus antepasados con incienso y alcohol. Prosiguen la celebración después y alguno queda K.O a media mañana
Exceso de celebración.
Antes de salir hacia Antigua de vuelta, visito un hotel donde van los touroperadores que trabajan Guate, es el San Tomás, también santo, pero con un patio colonial lleno de jardines, fuentes y unos 30 loros, cacatúas y demás pajarillos enormes de gran colorido y pico grande, grande. Me fijo y todos están sueltos pero acomodados en unos 10 soportes, por parejas y aparentemente muy agusto hablando ¨holaaaa, amigoooo, como estasss, holaaaa¨ genial, tomo un cafetin de Guatemala, escuchando también a un grupo de musicos tocando la marimba.
Ya de vuelta, cogemos la panamericana, que en este trayecto es como mitad autopista del Huerna, con fortísimas pendientes, y mitad Unquera-Llanes, con desvíos, cortes y desprendimientos de altura considerable. Tras unas tres horas y el culo tieso del colectivo donde veníamos 19, divisamos los volcanes del área de Chicastenango, todos alineados y con las nubes pegadas a sus cráteres, a modo de erupción simulada. Llegando a Antigua programo el día de mañana, que para no perder la concentración comienza saliendo a las 4 de la mañana hacia las ruinas de Copán, unas seis horas de viaje en colectivooooooooo..oooo, y se dice del espacio de los charter, las rotulas hay que despegarlas del respaldo del tocayo de adelante. Quesadillas para cenar, ducha y cama, con probabilidades de noche musical. Somos 7 en la habitación, alguno ronca fijo.
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